¿QUÉ ES EL SÍNDROME DE LAS PIERNAS INQUIETAS?

Puede comenzar a cualquier edad; la mayoría de afectados son de edad media o mayores

(Foto: Internet)

Por: Katherine Morón 

El síndrome de “la pierna inquieta”  es un trastorno del movimiento de las piernas que hace que la persona que lo padece tenga alteraciones del sueño, con lo que acumula cansancio y acaba sufriendo un deterioro físico y psicológico. 

También llamado RLS por sus iniciales en inglés, es una condición en la cual sus piernas se sienten muy incómodas cuando usted está sentado o acostado. 

Ocurre tanto en el hombre como en la mujer a cualquier edad, incluso durante la niñez, pero con frecuencia empeora con la edad y se convierte en un problema para las personas en estado de edad avanzada. 

El SPI (síndrome de las piernas inquietas) puede hacer que tanto el sueño como los viajes sean difíciles e incómodos. 

Los síntomas de este síndrome son sensaciones de dolor, hormigueo o ardor en las piernas, lo cual puede hacer que le sea difícil dormir o mantenerse sentado durante períodos de tiempo largos. Mover las piernas hace que la sensación desaparezca durante unos cuantos minutos, pero vuelve a aparecer después de que usted se vuelve a sentar o a recostar. 

Un porcentaje  alto de personas que padecen esta condición tienen problemas para conciliar el sueño. Cuando por fin logran recuperar el sueño, despiertan durante la noche con una urgencia irresistible de mover las piernas, ponerse de pie y caminar.

Puede ser hereditario, es decir, se transmite entre los miembros de una familia.  

Si esta condición comienza a afectar su patrón de sueño, deberá consultar a su médico. 

¿Y hay tratamiento? el síndrome no tiene una cura definitiva, pero sí se puede controlar con complementos de hierro o dopamina según sea el caso, pero lo más importante es tratarlo debido a los problemas diurnos que pueden manifestarse.

Cabe indicar que este síndrome no desencadena otras enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson, sin embargo, si es común que presenten piernas inquietas quienes ya tienen Parkinson.

Mantenga a su médico informado acerca de cómo usted se está sintiendo. El médico le puede sugerir técnicas de relajación distintas y cambiarle su medicamento si éste no le está sirviendo. 

FUENTE:RPP