"El asesinato de un
dirigente político es una herida de muerte a la democracia", dijo el
representante de la OEA.
El
polémico asesinato del opositor venezolano Luis Manuel Díaz, ha puesto otra vez
en el ojo de la tormenta el régimen de ese país caracterizado por la opresión a
los detractores. Frente a ello, el secretario general de la Organización de
Estados Americanos (OEA), se manifestó.
El representante de la OEA sostuvo que con el
asesinato se busca 'amedrentar' a los opositores, y pidió al gobierno de
Nicolás Maduro actuar para que las elecciones legislativas del próximo 6 de
diciembre no sean un ejercicio de fuerza, violencia y miedo.
Tras
estas declaraciones, el presidente de Venezuela respondió al diplomático
uruguayo y lo tildó de 'basura'. "Almagro es un señor basura, con el
perdón de la basura", afirmó el mandatario.
Los
dimes y diretes entre ambos continuaron, esta vez, el representante de la OEA
envió un comunicado en el que aclaró que lo sucedido no es un episodio aislado,
sino que da conjuntamente con otros ataques realizados contra otros dirigentes
políticos de la oposición en una estrategia de amedrentamiento.
"El
asesinato de un dirigente político es una herida de muerte a la democracia, y
una sucesión de hechos de violencia política en un proceso electoral es la
muerte de mucha democracia", agregó Almagro a su comunicado.
Finalmente,
el secretario general de la OEA pidió al régimen venezolano actuar para que
cese todo tipo de violencia y haya garantías más absolutas para todos, y para
que las elecciones sean 'una fiesta' y no un ejercicio de fuerza, violencia, y
miedo.
"Debemos poner fin a los discursos cargados de
amenazas, de pronósticos oscuros, y a desarmar cualquier grupo civil armado,
especialmente aquellos que dependen del Gobierno o del partido de
gobierno", concluyó.
Fuente: La República
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