Pasó
de la defensa furibunda de su supuesta inocencia a sollozar en la Comisión de
Levantamiento de Inmunidad Parlamentaria; pero ahora que el Congreso dejó
expedito el camino para que se ejecute la condena de cinco años de prisión en
su contra, el ya desaforado legislador Edwin Donayre Gotzch estaba -hasta el
cierre de esta edición- simplemente inubicable.
Con
una abrumadora mayoría de 97 votos a favor, el Pleno del Parlamento aprobó el
levantamiento de la inmunidad del congresista de Alianza para el Progreso,
sentenciado por el caso “Gasolinazo”.
Tal
como se adelantó, Salaverry remitió de inmediato una misiva a su homólogo del
PJ, José Luis Lecaros. Dicha institución -en su Twitter- informó que mediante
la Segunda Sala Penal Liquidadora de Lima notificó de manera oportuna a la
Policía Judicial “para que proceda de inmediato con la ubicación y captura a
nivel nacional”.
NO
HABIDO
Sin
embargo, hasta el cierre de esta edición el paradero del también excomandante
general del Ejército era desconocido. Fuentes de la Policía refirieron que se
preparaba un despliegue para la ubicación del apepista. Sobre el tema, otras
fuentes del Legislativo, aseguraron que Donayre despistó los últimos cuatro
días a su cuerpo de seguridad (compuesto por agentes de Seguridad del Estado,
quienes pertenecen a la Policía), pues para evitar que vayan a su vivienda les
decía que le dieran el alcance en diversos puntos de la capital, aunque no se
llegaron a encontrar en ninguna ocasión.
Fuente: Diario Correo
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