El jefe del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Julio
Magán, reveló que el recluido empresario Rodolfo Orellana intentó esconder el
celular que tenía en su celda al momento del allanamiento.
“En el registro del acta de incautación, se le pregunta al interno
si quiere que se le llame a un abogado. Él dice que no quiere el abogado, que
no tiene nada”, comentó.
“Cuando se procede a hacer el registro, se le encuentra el
celular que estaba tirado en el baño. Cuando él ha ingresado no tuvo tiempo de
esconder el celular y lo ha tirado en el baño”, sentenció.
Según Magán, desde hace un tiempo tanto la Policía como el
Ministerio Público tenían sospechas de que Orellana tenía en su poder un
teléfono móvil.
“Cuando se ha tenido la certeza de que ya tenía el interno
el aparato telefónico, el Ministerio Público pidió la autorización al juez que
autorizó la medida de allanamiento y registro con los fines de incautación de
bienes”, mencionó.
El jefe del INPE indicó que Orellana ya fue trasladado al
penal de Challapalca, en Tacna
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