La flamante jefa de la Superintendencia Nacional de Educación Universitaria (Sunedu), Lorena Masías, comentó que las instituciones que funcionan con autorización provisional deberán adecuarse a los estándares de calidad que se implementarán en las próximas semanas.
Antes del cierre del Consejo Nacional de Funcionamiento de Universidades (Conafu), 66 universidades se encontraban funcionando provisionalmente. Ahora, su destino está en manos de la Sunedu.
Además, dijo que se procederán a evaluar a estas universidades, las cuales contarán con un plazo prudente para que ajusten los parámetros, no solo en lo que respecta a infraestructura, sino también a personal docente y plan de enseñanza.
“Una vez que se defina los estándares de calidad, se puede aplicar a ese grupo y evaluar a quienes alcancen esos estándares de calidad, dentro de los plazos. En base a ello, se tomarán una decisión, si se licencia o no. No se puede licenciar a universidades que no cumplen con los estándares”, comentó.
La jefa de la Sunedu sostuvo que, junto al consejo directivo, deberá definir el futuro de los estudiantes de aquellas universidades cuyas facultades sean cerradas. Una primera opción para estas universidades que no alcancen superar la evolución es que ya no realicen exámenes de admisión, mientras que la otra posibilidad es que los alumnos de estas casas de estudio sean trasladados a otras universidades que sí cuenten con autorización.
Fuente: La República
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