La abogada aseguró que su imagen
ha sido dañada y maltratada desde que su nombre fue propuesto. "Esas
acusaciones son falsas, son interesadas", dijo.
La electa defensora del Pueblo,
Pilar Freitas, envió una carta al Congreso de la República en la que declinó a
asumir el cargo, por el que, según comentó, su imagen ha sido maltratada y su
familia se ha visto seriamente afectada.
La también regidora de Lima
aclaró que no solicitó ser candidata a la Defensoría del Pueblo, sino que fue
invitada por la bancada de su partido Perú Posible.
Asimismo, aseguró que no existe
ninguna prueba en su contra y su familia se ha visto afectada con los
comentarios y cuestionamientos en su contra. "No tengo ningún interés que
no sea el bienestar de mi patria", expresó.
"No acepto la designación de
defensora del Pueblo que el Congreso de la República me ha confíado",
escribió.
En comunicación con ATV+, comentó
que habló con el mismo líder de su partido, Alejandro Toledo, a quien le dijo
sentirse maltratada desde antes de que el Parlamento la eligiera como titular
de la Defensoría del Pueblo.
"Nunca he aprovechado
políticamente un cargo. Esas acusaciones son falsas, son interesadas. No tengo
ningún proceso abierto de orden penal", manifestó.
Al ser consultada sobre su
capacidad para el cargo que, finalmente declinó, indicó que es una persona
preparada para la importancia de ese puesto. "No soy improvisada, tengo
experiencia en el sector público, tengo maestrías y doctorados", señaló.
Fuente: La República
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