Una mujer declarada muerta por los
médicos luego de ser diagnosticada de un daño cerebral irreparable, despertó
segundos antes que le extirparan sus órganos para ser donados. Identificada
como Colleen Burn de
41 años, fue desconectada de los aparatos que la mantenían con vida. Pero cuando
los médicos la llevaron al quirófano para extirparles los órganos, tal como
había ordenado su familia, la mujer abrió los ojos y salvó milagrosamente de
morir, lo que dejó atónitos a los médicos.
Cabe señalar, que esto ocurrió en
el 2009; sin embargo, recién sale a la luz tras la publicación de un informe en
el que se indica, hubo negligencia puesto que no se realizaron las pruebas
pertinentes, pese a que, una enfermera informó a los galenos sobre pequeños
movimientos de los pies, boca y lengua de la paciente. Pero, por increíble que
parezca, la mujer terminó por suicidarse 16 meses después de este suceso, tras
sufrir una grave depresión.
Fuente: La República
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